María estás enbarazada.... primer día del novenario de Navidad

« Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel 
 a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, 
a una virgen desposada con un hombre llamado José, 
de la casa de David; el nombre de la virgen era María. »

Y de repente lo vi, era un ángel, la verdad no supe si correr o quedarme a escucharlo, decidí quedarme porque era tanta mi impresión que no creía poder dar un paso. 

Salve, llena de gracia,
el Señor está contigo

Cuando escuche esas palabra no entendí mucho, "llena de gracia"! ¿eso es conmigo? le pregunté

«No temas,
María, porque has hallado gracia delante de Dios »

seguí escuchando estupefacta

Hoy celebramos la aparición de María en Lourdes.

A esta advocación se le pide consuelo para  los afligidos y salud para los enfermos.
Puedes pedirle a la madre de Jesús por aquellos que sufren dolores en el cuerpo y en alma.

El 11 de febrero de 1858, tres niñas, Bernadette Soubirous, de 14 años, su hermana Marie Toinete, de 11 y su amiga Jeanne Abadie, de 12 salieron de su casa en Lourdes para recoger leña. Camino al río Gave, pasaron por una gruta natural donde Bernadette escuchó un murmullo y divisó la figura de una joven vestida de túnica blanca, muy hermosa, ceñida por una banda azul y con un rosario colgado del brazo. Se acercó y comenzaron a rezar juntas, para luego desaparecer.

La Virgen de la Medalla Milagrosa 27 de noviembre


La Virgen de la Medalla MilagrosaEl 27 de noviembre de 1830 la Virgen Santísima se apareció a Santa Catalina Labouré, humilde religiosa vicentina, y se le apareció de esta manera: La Virgen venía vestida de blanco. Junto a Ella había un globo luciente sobre el cual estaba la cruz. Nuestra Señora abrió sus manos y de sus dedos fulgentes salieron rayos luminosos que descendieron hacia la tierra. María Santísima dijo entonces a Sor Catalina:
"Este globo que has visto es el mundo entero donde viven mis hijos. Estos rayos luminosos son las gracias y bendiciones que yo expando sobre todos aquellos que me invocan como Madre. Me siento tan contenta al poder ayudar a los hijos que me imploran protección. ¡Pero hay tantos que no me invocan jamás! Y muchos de estos rayos preciosos quedan perdidos, porque pocas veces me rezan".
Entonces alrededor de la cabeza de la Virgen se formó un círculo o una aureola con estas palabras: "Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a Ti". Y una voz dijo a Catalina: "Hay que hacer una medalla semejante a esto que estas viendo. Todas las personas que la lleven, sentirán la protección de la Virgen", y apareció una M, sobre la M una cruz, y debajo los corazones de Jesús y María. Es lo que hoy está en la Medalla Milagrosa.
El Arzobispo de París permitió fabricar la medalla tal cual había aparecido en la visión, y al poco tiempo empezaron los milagros. (lo que consigue favores de Dios no es la medalla, que es un metal muerto, sino nuestra fe y la demostración de cariño que le hacemos a la Virgen Santa, llevando su sagrada imagen).